La terapeuta sexual y familiar, Ana Simó, dijo que en sicología y siquiatría la infidelidad es considerada una enfermedad, conocida como “Don Juanismo”.
Señaló que cada ser humano tiene la capacidad de vivir con una sola persona, sin embargo, hay componentes culturales y químicos que influyen en la comisión de la infidelidad, especialmente en el hombre.
“Lo que sucede es que para el hombre es más fácil buscarse una amante que trabajarse en alguna situación, porque la amante significa un ansiolítico, es mi distracción, lo que me hace sentir bien y me libera de mucha tensión laboral o familiar. Por esto los hombres prefieren tener una amante y es una situación cultural donde hemos tenido permiso para hacerlo desde hace siglos”, manifestó.
Simó explicó que la infidelidad se considera una enfermedad, principalmente cuando el mismo hombre dice en consulta que no puede tener solo una pareja, mientras que otros piensan distintos porque se dan cuenta del desgaste económico y emocional que ocasiona tener una o varias amantes.
Asimismo, señaló que muchos de los problemas de salud que los hombres y mujeres presentan con el tiempo, tales como gastritis, ritmias cardiacas y migraña, son provocadas por la tensión, las mentiras, la ansiedad, la doble moral, el sentimiento de culpa a causa de las infidelidades.
Por otro lado, la doctora explicó que uno de los casos más comunes últimamente entre parejas es la adicción al sexo cibernético, que se realiza mediante intercambio de imágenes, videos, palabras gemidos o masturbación.
“El sexo cibernético es uno de los mecanismos de infidelidad donde el esposo o la esposa, por ejemplo, se acuesta en la cama con la laptop aparentemente trabajando, pero en realidad está teniendo sexo con una persona que probablemente no conoce”, reveló.

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